Este ejercicio de Qi Gong ayuda a estimular la circulación del Chi y a fortalecer la energía de los riñones, fuente de vitalidad y equilibrio interior.

  1. Relaje completamente el cuerpo.

  2. Separe las piernas a la altura de los hombros.

  3. Levante ambas manos hacia arriba, en posición vertical.

  4. Baje el cuerpo acompañando el movimiento de las manos.

  5. Junte las manos, colocando el exterior de las palmas uno contra otro.

  6. Suba hacia arriba, elevándose sobre la punta de los pies.

  7. Gire las manos hacia el interior.

  8. Presione todos los dedos contra el pulgar, manteniendo los dedos juntos mientras baja lentamente.

Repita este movimiento cinco veces para activar el flujo de energía vital.